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martes, 30 de octubre de 2012

BOLLIT Y GENES M

Hay veces en las que unas palabras, una situación o simplemente un olor te hacen retroceder en el tiempo.
Yo no sé si ya me estaré haciendo mayor, pesada y por lo tanto "madre" (ejem... cuántas veces he oído ya eso de "no seas pesadita mamá!", o "jo, que síiii, que yaaaa mamáaa!"), pero muchas veces me sorprendo a mi misma diciendo o haciendo cosas que estaba muuuuy harta de oír cuando era pequeña o adolescente. Cosas del tipo "no has comido nada...", "no andes descalzo...", "recoge tu cuarto a la de ya!", "llevas llaves??", "llévate una chaqueta por si acaso..."...
Mi madre siempre me decía: "Ale, venga!". Y eso servía para todo. Con una mirada y un "ale venga" ya sabía yo si tenía que recoger algún trasto, poner la mesa, coger la dichosa chaqueta, subirme a dormir o ir a la ducha. Y todavía me lo dice de vez en cuando!!
Creo que cuando nos convertimos en madres se nos altera el código genético y empezamos a decir las mismas cosas y a tener las mismas preocupaciones todas, porque seguro que eso es cosa de genética y no de edad. Una madre dice las mismas cosas tenga 17, 37, 47 o 107 años, son los genes M.

Foto de http://www.cuina.cat

Y son seguramente los genes M los que tienen un empeño tremendo por que los niños coman verdura. Verdura... puaj! esas cosas verdes que sólo comen las vacas y las ovejas??? Así están y esa cara tienen, de comer verde!!

A veces hay suerte y los niños se comen las verduras después de protestar poco, otras veces hay mucha suerte y se las comen sin rechistar, y otras veces se da el caso de niños extraterrestres a los que les encanta la verdura e incluso la piden.

Yo de pequeña me convertía en niña extraterrestre cuando cenaba en casa de la Ueli.
Mis abuelos casi siempre entre semana cenaban hervido, Bollit, y a mi me encantaba cenar bollit en casa de mis abuelos.
El bollit no son más que verduras y patata hervidas en agua con sal. Supongo que en cada casa tendrán costumbre de poner unas verduras u otras, pero lo que se ponía en casa de mi abuela eran: patatas, zanahorias (carlotas en mi pueblo), judías verdes, y cebolla. Algunas veces también le ponía habas tiernas, o alcachofas, coles de bruselas, acelgas... No es fácil que un niño coma esto, y mucho menos que le encante y lo pida.
Por qué me encantaba a mi?
Pues porque me lo preparaba así:
Todo chafado, con aceite, sal y un poco de atún de lata, y haciendo con el tenedor un volcán con el puré. Volcán que coronaba con una riquísima aceituna rellena!!
Eso sí... la aceituna no me la podía comer hasta que se cayera por los agujeros que yo le tenía que ir haciendo al volcán empezando por la base mientras me lo comía.
Era divertido y estaba muy rico!! Y el premio de la aceituna era ya lo más!

Las y los que no tengáis niños extraterrestres podéis probar a ver si hay suerte...

Rossella

jueves, 25 de octubre de 2012

DECORAR CALABAZAS

Pues parece que se acerca Halloween...
La verdad, la verdad es que a mi Halloween me da bastante igual. Nunca me he disfrazado para la ocasión y nunca lo he celebrado. Yo soy más del terreno, de Todos los Santos, de no dejar la cama sin hacer cuando te levantas el Día de las Ánimas o de los Difuntos, porque si no, se meten las almas en tu cama y ya no podrás descansar bien hasta el año siguiente (jaja... je.. je... glups! yo por si acaso la hago nada más levantarme!!)

Miento, a que sí Mercedes??
Un año nos disfrazamos Mercedes y yo. Bueno, no nos disfrazamos, pillamos lo primero que encontramos por el armario, aquello que está al fondo... al fondo, y que NO forma parte del fondo de armario precisamente, porque está pasadito pero como está nuevo te da pena tirarlo, y nos lo encasquetamos de forma que quedase terroríficamente combinado. Nos engrasamos el pelo, nos pusimos unas gafotas y nos pintamos un diente negro y sombra en el bigote.
Y todo esto así, porque sí, sin avisar a nadie. Pero no por gusto, sino porque teníamos una fiesta de Halloween en el jardín de la urbanización, para los niños, claro.
Los niños lloraron al vernos y las madres también, pero de la risa.

Lo que sí me gusta es el otoño, los sabores del otoño, los colores, las castañas y las calabazas. Por eso he pensado en poner una entrada dedicada a la decoración con  y de calabazas.
Aquí os dejo algunas propuestas, por si os apetece...



















Estas últimas creo que le van a encantar a mi amiga Gave, y sé que las puede mejorar....

Os dará tiempo a hacer alguna? Espero que sí..

Rossella

Fuentes: craftcornersthesundaysparklecountryliving, fairwayncmarthastewartblog.greystoneatwidewaters.lincolnaptscre8tivecompass, mysweetsavannah

lunes, 22 de octubre de 2012

MAGDALENAS DE CALABAZA Y TRES LECHES

O.... Una Serie de Catastróficas Desdichas...
O.... Pesadilla antes de Halloween...
O.... Rossella al Borde de un Ataque de Nervios...



Haciendo estas magdalenas se me rompió el tamiz, uno de esos que es como un bote de conserva con un asa y unas aspas que se mueven cuando aprietas el asa... me explico? sabéis cual es? Pues roto. No funcionan las aspas, se quedan enganchadas y saltan de repente, así que de vez en cuando la harina o el azúcar glass salen disparados hacia el infinito y más allá para acabar aterrizando graciosamente sobre mi...
Haciendo estas magdalenas creo que mi horno ha entrado en una Situación Crítica Irreversible. Ya lo hacía pero era controlable, ahora ya no lo es: calienta mucho más por la derecha que por la izquierda, y cuando me quiero dar cuenta las cosas están churruscadas por un lado y crudas por el otro. Un encanto...
Haciendo estas magdalenas se me han roto tres mangas pasteleras. Todas las que tenía. Y no, no tenía bolsas normales para fabricarme una casera. Y una cosa digo: que nadie me pregunte cómo he colocado el frosting (mejor dejado caer el frosting "a lo mecagondiés!")...

:)
Ale, ale... ya pasó.
:)

Para hacer la masa de las magdalenas se necesita:

200 gr de Harina
100 gr de Azúcar
1 cucharada colmada de Canela molida
1/2 cucharadita de Nuez Moscada molida
1 pizca de Sal
2 cucharadas de Levadura Royal (polvo de hornear)
2 Huevos
1/2 taza de puré de Calabaza
1/2 taza de Leche
1/4 de taza de Aceite de girasol

Para la salsa Tres Leches:

1 vaso de Leche Evaporada
1/2 vaso de Leche condensada
1 vaso de Nata para cocinar

Y para hacer el frosting de canela:

100 gr de Mantequilla a temperatura ambiente
200 gr de Azúcar glass
1 cucharada de canela
2 cucharadas de Leche
1 pizca de Vainilla

Primero asamos al horno la calabaza hasta que esté blandita. Yo asé media calabaza mediana y tardé unos 45 minutos a 200ºC, pero no se necesita tanta calabaza, y si queréis, podéis asarla en el microondas, aunque el sabor no es tan rico. Cuando la tengamos asada aplastamos la carne con un tenedor hasta dejarla como un puré no demasiado fino.

Bajamos el horno a 180ºC o precalentamos el horno si hemos asado la calabaza en el microondas.

Ahora mezclamos en un bol todos los ingredientes secos: la harina, el azúcar, la canela, la nuez moscada, la sal, y la levadura. Cuando estén mezclados vamos añadiendo, sin dejar de remover, los huevos, la leche, el aceite y el puré de calabaza.

Vertemos la mezcla en 12 moldes de silicona para magdalenas y horneamos durante 15-20 minutos (o hasta que al pincharlas con un palillo éste salga limpio). El molde de silicona es necesario porque luego las vamos a empapar con la salsa Tres Leches, y si el molde es de papel se ablandará y quedará feo.

Dejamos enfriar las magdalenas y las pinchamos varias veces con un palillo. Hacemos la salsa mezclando todos los ingredientes y con una cuchara vamos bañando las magdalenas, poco a poco y hasta que casi terminemos la salsa. Deben quedar bien jugosas.

Las dejamos reposar en la nevera unas horas para que la salsa se reparta bien por toda la masa y se asiente. (Mejor de un día para otro)

Las sacamos de los moldes de silicona y las ponemos en moldes de papel (podéis poner por debajo de los moldes un poco de papel aluminio para que la salsa no empape demasiado el papel de los moldes).

Hacemos el frosting: Batimos la mantequilla con un tenedor hasta que quede como una pomada suave y le tamizamos por encima la mitad del azúcar glass, removemos hasta que se integre bien y repetimos la operación con el azúcar restante. Añadimos la canela y removemos bien, e igual con la leche y la vainilla. Metemos el frosting en una manga pastelera y decoramos.

Listas!

Espero que os gusten y que si las hacéis no os pase nada!! je...

Rossella

PD. Una versión más cómoda de hacer es en plan bizcocho en lugar de magdalenas sueltas.
:)






jueves, 18 de octubre de 2012

BONITO EN ESCABECHE

Desde que el hombre caza que ha tenido que ingeniárselas para conservar la comida que no podía consumir en un corto periodo de tiempo. Una parte de los alimentos que conseguía debía guardarlos para poder consumirlos en momentos de escasez. Las formas de conservación que ha ido utilizando el hombre, salazones, ahumados, conservas en aceite o manteca..., fueron descubiertos de forma casual, por medio de la observación de lo que sucedía a su alrededor de forma fortuita.


El origen del escabeche se desconoce, aunque se puede atribuir a la cultura islámica, porque la palabra "escabeche" podría provenir de dos palabras árabes: "sakbäy" (que significa "guiso de carne con vinagre"), o de "sikbâg" que era un adobo hecho con aceite frito, vino o vinagre, ajo, laurel, etc.
La forma de conservar en vinagre que se usaba en  Al-Andalus se llamó "iskebêg", luego pasó a llamarse "escabetx" y al final "escabeche".

Es en en s. XIV donde en un manuscrito del Mestre Rupert de Nola, cocinero del rey aragonés Fernando de Nápoles, aparece la primera referencia escrita sobre este tipo de conservación de los alimentos.
El escabeche es una conserva típica de la cocina española, y así está reconocido en el diccionario de la Academia de la Gastronomía francesa, donde se dice que el escabeche es "una conserva a la española, muy aromática".

El escabeche no suelo prepararlo como forma de conservación porque no suele quedar nada que conservar.... lo tomamos como plato, acompañado de una sencilla ensalada verde. El bonito lo preparo así:


Ingredientes para 4 raciones:

Una cola de bonito de tamaño mediano
1 Cebolla blanca
1 hoja de Laurel
15 granos de Pimienta negra
Vinagre de Jerez
Vino blanco
Aceite de Oliva Virgen Extra
Una ramita de Tomillo
6 o 7 dientes de Ajo
Sal

Si no lo ha hecho el pescadero, quitamos la espina al bonito, lo limpiamos bien de espinas y de piel y lo separamos en cuatro lomos.

En una cazuela ponemos suficiente aceite de oliva como para cubrir todo el fondo de forma generosa.

Cortamos la cebolla en medios aros y la rehogamos junto con los ajos (enteros y con piel, sólo hay que hacerles un pequeño corte). Cuando empiece a estar dorada la cebolla, añadimos el laurel, la pimienta y el tomillo, damos unas vueltas y metemos el bonito con un poco de sal.
Ahora lo cubrimos con la misma cantidad de vinagre que de vino blanco, y cuando rompa a hervir, tapamos la cazuela y lo dejamos a fuego lento de 15 a 20 minutos, depende del tamaño de los lomos de bonito, pero no mucho más tiempo para que no se reseque.

Listo!

Espero que os guste.

Rossella



miércoles, 17 de octubre de 2012

GARBANZOS CON SALMÓN

Esta receta me la inspiró María de Decorecetas. Tiene unos platos de cuchara riquísimos en su blog, y el lunes publicó una receta de Garbanzos a la Catalana que me gustó mucho. Ella los hizo en la Thermomix, pero yo no me acabo de acostumbrar a cocinar así, y he preferido usar la cacerola de toda la vida.


Me gustan las legumbres, me parecen sanísimas y además muy sufridas, se acoplan a todo y todo les viene bien, casi nunca protestan... Además ahora que vienen los fríos (o eso espero, porque ya está bien de calores y veranillos de San Miguel y ya toca!), un plato de cuchara es fantástico.

Creo que fue en aquella entrada de María donde le dije que siempre olvidaba poner los garbanzos a remojo la noche antes, y esta vez no iba a ser menos, así que los he usado de bote... qué le voy a hacer? soy un poco despistes...

Bueno, vamos con los ingredientes de la receta, que son para 2-3 raciones:

1 bote de Garbanzos cocidos de 500 gr
2 dientes de Ajo
8 - 10 Almendras crudas y sin piel
Azafrán
1/2 cucharadita de Colorante alimentario
1 Cebolleta
1/2 Pimiento italiano
3 Tomates maduros
1/2 pastilla de caldo concentrado
Un trozo de lomo de Salmón
15-20 colas de Gambas pequeñas
Agua caliente
Perejil picado
Aceite de Oliva Virgen
Sal y Pimienta
Una pizca de Comino en polvo

En una cacerola ponemos un chorrito de aceite de oliva (no mucho, unas tres cucharadas), y todavía frío, echamos las almendras enteras hasta que cojan un leve color dorado. Las retiramos de la cacerola y las dejamos enfriar (en caliente no se pican bien porque no están demasiado crujientes, y vamos a picarlas).
Mientras se enfrían, pelamos los ajos y los machacamos un poco en el mortero junto a las hebras de azafrán, luego añadimos las almendras y las picamos junto a los ajos (a mí me gusta que haya trocitos de todos los tamaños, así que no os preocupéis por picarlas mucho). Reservamos.

Picamos fino la cebolleta y el pimiento, y rallamos los tomates.

En la cacerola donde habíamos dorado las almendras, hacemos un sofrito con la cebolleta y el pimiento picados. Cuando la cebolla empiece a dorar, añadimos la media pastilla de caldo, damos unas vueltas e incorporamos el tomate, el colorante, el comino y un poco de sal y pimienta. Dejamos que se termine de hacer el sofrito.
Añadimos los garbanzos, el salmón cortado en tacos, las colas de gamba, la picada de ajos y almendras, el perejil picadito y cubrimos con agua caliente.

Dejamos cocer a fuego lento hasta que el caldo haya reducido a la mitad (unos 30 minutos, no más porque los garbanzos ya están cocidos).

La pizca de cominos en polvo es opcional. Es muy poca cantidad y casi no se nota el sabor, pero a mi me gusta poner comino a las legumbres para evitar... en fin.... los "problemillas digestivos" posteriores.

Espero que os guste la receta. Si queréis ver la original la tenéis aquí.

Rossella


lunes, 15 de octubre de 2012

TARTA ESPEJO DE CHOCOLATE

Hace poco fue mi cumple y aunque no debería, me auto regalé una tarta de choco... porque yo lo valgo! je. 


La llamo "Espejo de Chocolate" porque la cobertura queda tan brillante que se refleja todo en ella y así puedo preguntarle aquello de "Espejito, espejito... Quien es la más bonita?". Claro que corro el riesgo de que me conteste: "Pues como sigas así, cumpliendo años y mirándote en tartas de chocolate, tú no, mona!"
 En fin, mejor que vayamos con la receta...

Los ingredientes necesarios son:

200 gr de Chocolate (yo suelo usar Lindt 70% de repostería)
200 gr de Manteca de cerdo
250 gr de Azúcar
250 ml de Leche
200 gr de Harina de repostería
1 cucharadita de Café instantáneo
1 cucharadita de Canela
3 cucharadas de Cacao en polvo (Valor sin azúcar)
4 Huevos
1 sobre de Levadura Royal
1 copita de Ron Legendario, el Elixir (opcional)

Precalentamos el horno a 180ºC.

En un cazo y a fuego suave mezclamos la manteca, el chocolate, el azúcar, la leche, el café, la canela y el cacao. Removemos bien mientras se calienta, pero no debemos dejar que hierva.

Una vez todo bien mezclado, se aparta del fuego y se añaden las yemas de los 4 huevos. Se remueve hasta que las yemas estén bien integradas en la mezcla. De esta preparación reservamos una taza. Cuando el resto esté frío añadimos la harina, la levadura y las claras de huevo montadas a punto de nieve.
Mezclamos todo cuidadosamente para que no se bajen las claras, con movimientos envolventes y se vierte en un molde de 26 cm un poco engrasado.

Horneamos a 180ºC durante 25 o 30 minutos.

Cuando temple, lo sacamos del molde y con una jeringuilla le inyectamos un poco de ron pinchándola varias veces (esto no venía en mi receta, pero hace tiempo vi que Carlos de Mercado Calabajío hacía un bizcocho con este ron y me encantó, así que, como era mi cumple, yo se lo puse! jeje). 
Luego vertemos por encima la taza de la mezcla de chocolate reservada antes.

Listo para mirarse en él!

Espero que os guste!

Rossella


domingo, 14 de octubre de 2012

FELIX BAUMGARTNER



Ya sé que no tiene nada que ver con la comida...
O sí....
Lo patrocina Red Bull...
Después de pasar toda la tarde pendiente... no tengo nada más que decir. Alucinante. Con un par!

martes, 9 de octubre de 2012

CINNAMON SWIRLS



Hace poco estuve en Londres, y aparte de volver cargada de chorraditas, tonterías y bobadas de todas y cada una de las 200.000 tiendas, restaurantes, escuelas de cocina y espacios polivalentes que Jamie Oliver tiene allí, volví con un kilo o dos de más porque me estuve atiborrando a Cinnamon Swirls, que me encantan.
Estuvimos alojados en un B&B y por las mañanas nos los servían recién hechos, así que no tuve más remedio que preguntar a Alice la receta...

En cuanto volví a casa los hice. De sabor estaban iguales, pero de aspecto... la verdad, los suyos mucho mejores. Pero es que yo creo que a mi me pudo el ansia y mientras los hacía pensaba más en acabar pronto para poder comerlos que en hacerlos con todo el mimo. Me salieron por tanto bastante feuchos... y pequeños! Por eso prometo volver a hacerlos y cambiar las fotos (je, ya tengo excusa!!)

A mi me encanta el olor y el sabor de la canela. Una vez leí en un libro de esos viejunos que mi madre conserva de cuando soltera, que un truco que toda mujer debía conocer para "cazar" a un hombre, era hacer que la casa oliese a canela cuando le invitara a pasar, porque por lo visto el olor de canela despertaba algún tipo de sentido de máximo confort en el hombre, y hacía que te viera como una esposa ideal.
En fin... muy rancia me parece la idea. Pero lo que sí es verdad para mí es que entrar a casa y que te reciba un cálido aroma a canela que sale del horno, es como entrar en la felicidad automáticamente.

Pero vamos con la receta...

Ingredientes:

Para la masa:
800 gr de Harina de fuerza
125 gr de Mantequilla
2 tazas de Leche
1/4 de taza de Azúcar
50 gr de Levadura fresca o 7 de levadura seca
Y ella a veces le ponía también una cucharadita de Cardamomo

Para el relleno:
1/4 de taza de Mantequilla en pomada
2/3 de taza de Azúcar moreno
1/3 de taza de Azúcar blanco
2 cucharadas y media de Canela molida

Para el glaseado:
1/4 de taza de Mantequilla en pomada
150 gr de Queso crema
1 taza de Azúcar glass
2 cucharadas de zumo de Limón
unas gotas de extracto de Vainilla

1 Huevo para pintar los swirls antes de hornearlos

Y empezamos....

Hacemos la masa así:
Primero calentamos un poco una de las dos tazas leche (que quede tibia), añadimos la levadura y la dejamos reposar unos 5 minutos en un bol grande.

En la otra taza de leche derretimos la mantequilla calentándola un poco (que también quede tibia), y cuando la mantequilla esté liquida, añadimos esta mezcla a la anterior de la levadura.

Ahora vamos añadiendo el azúcar, la harina y en caso de que nos apetezca, el cardamomo. Vamos añadiendo la harina poco a poco y removiendo bien con una cuchara hasta conseguir una masa lisa. Acabar de amasar con las manos hasta que no se pegue a los dedos. Formamos una bola y la dejamos reposar en el bol, tapada con un paño o film de cocina, durante unos 40 minutos en un lugar cálido.

Ahora preparamos el relleno:
Mezclamos todos los ingredientes y reservamos.

Cuando la masa esté lista, la amasamos un poco y la extendemos con un rodillo formando un rectángulo de unos 35 x 60 cm y medio centímetro de grosor.

Untamos la masa con la mezcla del relleno de forma uniforme y generosa.

Enrollamos la masa formando como una salchicha. Pegamos el borde final con un poco de agua y cortamos en rodajas de dos centímetros de grosor. Ponemos las rodajas en una fuente de horno engrasada, la cubrimos con un paño o con film y los dejamos reposar otros 40 minutos.

Precalentar el horno a 250ºC unos 10 minutos antes de que termine el levado.

Ahora mezclamos todos los ingredientes del glaseado y reservamos.

Cuando termine el tiempo del reposado, batimos un huevo y pintamos la superficie de los swirls. Los metemos al horno durante 10 o 12 minutos a 250ºC.

Sacar del horno y dejar enfriar antes de rociarlos con cucharadas de glaseado.

Están muuuuuy ricos!

Espero que os gusten.

Rossella

lunes, 8 de octubre de 2012

OLLA EXPRESS ANTIGUA... Necesito vuestra ayuda!


Hola a todos, cocinillas y curiosos que pasáis por aquí, habituales, registrados, seguidores y visitantes esporádicos.
Necesito la ayuda de todos cuantos sepáis algo de ollas express. Os cuento.

Hace un tiempo publiqué una entrada sobre una Olla Express 71143 que le regalaron a mi madre. Es una olla muy antigua, de hecho es la primera patente que se concedió en España para ese tipo de ollas. Aquel artilugio despertó mi curiosidad y decidí investigar un poco el tema porque además pensé que como curiosidad podía interesar a alguno de vosotros. Tuve la suerte de que la olla llevase una chapa en la que se especificaba el número de patente y tiré del hilo.

El pasado sábado recibí un correo de Oscar. El es de Guatemala y ha encontrado una olla similar, pero no consigue información sobre ella (fabricante, año de fabricación... cualquier cosa que le ayude a conocer un poco más su pequeño tesoro), porque la suya no tiene nada a la vista que pueda ayudar a reconocerla.
Me mandó unas fotos de su olla express, que son las que publico, y como veréis es preciosa. Pensó que yo podía saber algo sobre ella al leer mi entrada de la 71143.
Yo no puedo ayudarle en su investigación, pero espero que alguno de vosotros sí podáis hacerlo.

Tanto Oscar como yo esperamos que podáis ayudar... os lo agradeceríamos infinito.

Gracias a todos y feliz semana!!

Actualización:
Gave, de Crochetingclub, nos ha mandado este enlace, en el que aparece una olla que se aproxima un poco. Bien! Gracias Gave!
http://digital.lib.msu.edu/projects/cookbooks/html/museum/object_064.html
Y También ha encontrado este otro enlace, en el que aparecen varias ollas a presión antiguas, pero en este caso se trata de ollas de UK.
http://pressure-cooker.org.uk/pressure-cooker-history.aspx

viernes, 5 de octubre de 2012

PASTELITOS!

Por culpa de mi entrada anterior, me he vuelto loca.
Sí, me he vuelto loca buscando los dichosos pastelitos con licor. Ni que decir tiene que no los he encontrado a la venta y he buscado por todas partes, también en las máquinas expendedoras de snaks, que era donde los compraba en mi última etapa de zampabollos. Nada....ni rastro.
Y lo peor es que NO recuerdo el nombre!, así que por mucho que los he buscado por internet, tampoco los he encontrado.

Pero... He encontrado toooodos los demás pastelitos que me acompañaron en mi niñez y adolescencia. Qué recuerdos!

Buscando información sobre estos pastelitos, me encontré con un artículo de http://blogs.lainformacion.com firmado por Viruete, que me gustó especialmente, así que hago un copia-pega, porque él lo explica muy bien y no no podría más que reescribir sus palabras.
Este es su artículo:


"Son los pastelitos que han marcado varias generaciones, superando a diferentes ajustes de mercado y convirtiéndose en emblema de la infancia de cientos de miles de personas. Muchos seguimos disfrutándolos, y nos parecen tan ricos como el primer día.
Pero no se trata de tótems inmutables. Bony, Tigretón y Pantera Rosa han ido adaptándose a los tiempos, y luchando por permanecer atractivos y vigentes. Algunos de sus compañeros no lo consiguieron y desaparecieron. Nosotros vamos a repasar la vida de estos tres productos entrañables que han resultado ser unos auténticos supervivientes.

Tigretón – El secundario trabajador
Antes: El Tigretón fue creado como una especie de “sidekick” para la Pantera Rosa, el Robín de su Batman. La gente de Bimbo acertó con un potente nombre: Rocky seguramente comía tigretones de vez en cuando.  El felino presidía la cubierta, y con el paso de tiempo, trataron de potenciar su imagen y crearon una mascota para el bollo. Mascota mutante, de diferentes aspectos que nunca ha llegado a calar.

Ahora: El Tigretón sigue como siempre, con esa combinación que no falla de nata y chocolate. Es precisamente su punto débil: la podemos encontrar en cantidad de productos. La mascota se ha transformado en un tigre fortachón con pinta de haber abusado de los más débiles en el colegio. Consiguió una beca deportiva en UCLA y pero nunca llegará a ser profesional.
Lejos quedan ya los tiempos en los que existía incluso un Tigretón de vainilla.  Eso sí: es el único que forma parte del más celebrado chiste sobre pastelitos:
-Tu padre es un proscrito.
-Y el tuyo un Tigretón.

Bony – El eterno superviviente
Antes: El envoltorio más anodino de todos. Mientras que otros contaban con divertidos personajes este bollo no tenía otro reclamo que su propio sabor. ¿Qué diantres era un Bony? Nadie lo sabía, no parecía divertido y muchos no daban por él. Pero su arma secreta, la deliciosa combinación de bizcocho, chocolate y mermelada es para muchos entendidos la más conseguida de todas las aquí expuestas.

Ahora: No podemos decir que la cosa haya mejorado mucho a lo largo de los años. Sigue careciendo de gancho visual, pero al menos han personalizado su presentación, con colores que invitan al consumo. Eso sí: nos hemos enterado ahora de que Bony es… un mono. ¿Desde cuando? Desde que todo tiene que tener mascota.
Bony es, ante todo, un superviviente. Comenzó como uno más de la línea de productos de de Bimbo. Lo tenía todo en su contra: un envase genérico, un nombre anodino, carecía de mascota… y sin embargo, se ha mantenido, contra viento y marea, ganándose el apoyo de unos pocos. Ha visto caer a dingos, tarzanes y ahí sigue. El auténtico Mad Max de la bollería industrial.
Quizá la clave está  en un peculiar ingrediente, esa mermelada que le otorga un sabor único dentro de la repostería de supermercado. Entre los amantes de la confitura de frutas (o lo que sea) no tiene rival, con lo cual apela a un mercado target muy concreto. Una filosofía muy actual: prosperar a base de la especialización.


Pantera Rosa – La niña mimada
Antes: La Pantera Rosa siempre fue la favorita de los críos. Su popular personaje le hacía destacar desde el primer momento entre el resto de pastelitos de la línea, y así continúo siendo durante el resto de su existencia, hasta llegar a hoy. No sólo el exterior del producto era más mimado: la peculiar invención de su cobertura rosa, de sabor único, lo convertía en una experiencia única.

Ahora: El tiempo ha sentado mal al producto. Los dibujos del personaje no son tan populares como antes, y sus compañeros actualizaron sus diseños. Hoy por hoy destaca menos, aunque está tan bueno como siempre. Una espada de Damocles pende sobre nuestra amiga: la continuidad de la licencia para usar a la estrella del cine. ¿Sigue siendo rentable? Diríamos que, hoy por hoy, la consumen más los adultos que los niños.

Bucanero – La segunda oportunidad
Antes: El Bucanero podía presumir de algo. Tenía crema, como bien indicaba su envase, y además disponía de un nombre que sugería aventura. ¡Al abordaje! O quizá no…  Porque  nunca fue especialmente popular.
Ahora: Dingo desapareció en los años 80, hace unos 25 años. No fue una buena década para los piratas: Jack Sparrow quedaba aún lejos, y su supuestamente deliciosa crema no consiguió encandilar a los demás. Puro darwinismo aplicado a la repostería comercial.
Pero… ¡Algo mágico sucedió! Bimbo ha decidido recuperar la marca y resucitar al Bucanero, ahora encarnado en un simpático lorito. De momento, la respuesta está siendo algo tibia y es difícil encontrarlos en muchos supermercados. ¿Aguantará?

La misma suerte corrieron Kontis, Tunos o aquel Dingo, producto de breve vida que contó con una popular licencia: era el bollo oficial de Goofy. Tampoco le sirvió para librarse del ERE que sesgó la carrera de su compañero pirata."

Encontré algunos más aparte de los que nombra Viruete... Os acordáis de estos??

Y como seguí volviéndome loca buscando, también encontré varias recetas para hacer Panteras Rosas en casa! Jeje... Por ejemplo:

Aquí podéis encontrar la receta de Pepekitchen:



O esta otra de Recetín:




Estáis ya bastante empachados??
Si encuentro los dichosos pastelitos de licor os informaré debidamente.

Feliz fin de semana a tod@s!

Rossella