...........................................................................................................................................................................................................
...........................................................................................................................................................................................................
...........................................................................................................................................................................................................
...........................................................................................................................................................................................................

jueves, 27 de noviembre de 2014

CÓMO HACER AZÚCAR INVERTIDO EN CASA




Estoy haciendo Helado de Turrón, y para su elaboración necesito Azúcar Invertido, para que no cristalice y quede más cremoso, y como no tenía, pues ayer hice un poco, porque es muy fácil y sirve para muchas otras cosas aparte de para hacer helado.

Muchos sabréis qué es el azúcar invertido, pero para los que no lo sepáis, os cuento un poco de qué se trata y para qué sirve. Es que si lo buscáis en la Wiki os va a decir esto: "Es la disgregación por hidrolización de la sacarosa en glucosa y fructosa. Su nombre hace referencia a que el poder rotatorio de la solución frente a la luz polarizada es invertido por el proceso de hidrólisis que separa la sacarosa en sus dos subunidades." O sea… que no entendí nada, porque la Química y yo nunca fuimos grandes amigas.

En resumen, el azúcar invertido es lo que se obtiene de la reacción química que se produce al mezclar el azúcar de mesa (sacarosa) con agua, un ácido y bicarbonato sódico, y el resultado es un azúcar líquido con la consistencia de un jarabe o de miel.

Lo podemos encontrar en el mercado, pero como ya he dicho, hacerlo en casa es tan fácil que muchas veces lo habremos hecho sin darnos cuenta, porque haciendo algo de repostería que lleve líquido, azúcar y zumo de limón, ya estaríamos produciendo esa reacción química. También lo podemos encontrar en productos naturales como la miel o el jarabe de arce, por eso muchas veces sirve como sucedáneo de estos productos.

Para qué se usa:

Este tipo de azúcar tiene un 30% más de poder endulzante que el azúcar común o sacarosa, por eso se emplea mucho más en confitería y panadería o bollería.

Tiene un gran efecto anti-cristalizante, por lo que disminuye el punto de congelación de la mezcla de los preparados de heladería. Los helados resultan mucho más suaves y cremosos.

Aumenta la fermentación de las masas porque la levadura digiere mejor la glucosa y la fructosa por separado que la sacarosa. Además retrasa el resecamiento porque aumenta la retención de la humedad. Por ello al usar el azúcar invertido en bollería, repostería, confitería o panadería, los alimentos duran más tiempo blanditos y jugosos, y se consigue que estén más dulces sin necesidad de utilizar tanto azúcar. Se usa también para dar brillo a la superficie de la bollería.

Cómo hacerlo:

Para hacerlo, lo primero que vamos a necesitar es ponernos una bata blanca, unas gafas de bucear, y aprovisionarnos de probetas, un vaso de precipitados, un matraz y, muy importante, revolvernos el pelo mucho. Ya somos químicos locos, así que ya podemos empezar.
Jajajaja … es broma, pero sí que vamos a hacer química. Lo que os aseguro es que no explota.

Necesitaremos:
Gasificante de Repostería
350 gr de Azúcar común o de mesa.
1 sobre (el azul y el blanco) de Gasificante de Repostería (como los de la foto, o cualquier otra marca)
150 ml de Agua Mineral (agua embotellada)

En un cazo mezclamos el azúcar y el sobre blanco (el ácido), y añadimos el agua.
Ponemos al fuego y removemos hasta que se disuelva todo, y cuando rompa a hervir, apagamos el fuego y esperamos hasta que esté a una temperatura de 60ºC. Si no tenéis termómetro no pasa nada, tocáis el cazo y cuando esté caliente pero sin que queme, ya estará a buena temperatura. Entonces añadimos el sobre azul (el bicarbonato) y removemos bien hasta que esté completamente disuelto.
En este momento se producirá espuma, es normal, y poco a poco irá desapareciendo hasta quedar una mezcla cristalina de la consistencia de la miel o un jarabe.

Lo pasamos a un tarro de cristal que podamos tapar bien y aguantará hasta un año en perfectas condiciones sin necesidad de tenerlo en el frigorífico.

Es conveniente etiquetarlo para poner la fecha en la que lo hemos hecho.

Listo!!

Las proporciones a utilizar son más o menos las siguientes:

En heladería se recomienda sustituir un 25% del azúcar total por azúcar invertido.
En repostería entre el 10 y el 20%.
En panadería un 50%.

Saludos!

Rossella