Verano y chocolate parece una combinación incompatible con la estación, pero no, y no porque esta sea una receta ligera y refrescante, sino porque anoche comimos muchos esta tarta sin ningún atisbo de remordimiento posterior, y diecisiete personas a la vez no pueden estar equivocadas. Por qué? Pues por una de esas razones simples, comprensibles y nada misteriosas que se corresponden con una lógica aplastante y que hacen que te dejes llevar por el sentido del gusto: simplemente, estaba buenísima.
La tarta la hizo Alba (sevillana de 18 añitos, preciosa y muy aficionada a la repostería), que está pasando unos días en casa y la llevó a la cena del pasado sábado. Por eso no tenemos fotos del corte, porque no era plan de llevarla empezada…
Le pedí la receta y aquí la dejo, por si os apetece probarla.
Hay que hacer dos bizcochos iguales, porque luego los partiremos en dos capas cada uno, de forma que tengamos cuatro capas y podamos poner nata entre ellas.
Los ingredientes para un bizcocho son:
250 gr de Chocolate negro 70% cacao
75 ml de Agua
175 gr de Mantequilla en pomada
250 gr de Azúcar mascabado o moreno
4 Huevos
100 gr de Harina de repostería (de la que lleva levadura)
50 gr de Cacao amargo en polvo
Los ingredientes para el relleno son:
250ml de Nata para montar (con el 35,1% de materia grasa, para que aguante firme mucho tiempo)
2 cucharadas soperas de Azúcar
Los ingredientes para la cobertura:
200 gr de Chocolate negro 70% cacao
2 cucharadas soperas de Agua
200 gr de Queso Mascarpone
100 gr de Queso tipo Philadelphia
Empezamos con el bizcocho, que se hace así:
- Precalentamos el horno a 160ºC.
- Preparamos un molde de 20cm, untándolo con mantequilla y forrándolo con papel de hornear. El molde debe ser alto, de unos 10 cm.
- Ponemos en un bol el chocolate con el agua, y lo derretimos en el microondas a mínima potencia o al baño María. Removemos bien y reservamos.
- Batimos la mantequilla con el azúcar moreno y vamos añadiendo los huevos uno a uno junto con una cucharada de la harina y batimos bien hasta que se integre cada huevo. Añadimos el chocolate derretido a esta mezcla. Batimos un poco más.
Añadimos el resto de la harina y el cacao amargo y removemos hasta que todo quede bien integrado.
- Vertemos la mezcla en el molde y nivelamos un poco la superficie.
- Horneamos durante una hora más o menos a 160ºC. El centro debe quedar un poco blando y pegajoso, así que cuando metamos el palillo para comprobar la cocción éste debe salir un poquito sucio.
- Dejar enfriar y cortar en capas. Lo normal es que la parte de arriba quede un poco hinchada, así que esa parte la cortamos y desechamos, y el resto del bizcocho lo partimos en dos con un cuchillo de sierra para obtener dos capas iguales.
- Hacemos el otro bizcocho procediendo del mismo modo.
Ahora hacemos el relleno:
- Batimos la nata con las varillas y cuando esté a medio montar, añadimos el azúcar y seguimos montando hasta que quede bien firme. Reservamos en el frigorífico.
Y por último, hacemos la cobertura:
- Ponemos en un bol el chocolate con el agua, y lo derretimos en el microondas a mínima potencia o al baño María. Removemos bien y reservamos.
- Mezclamos el mascarpone con el Philadelphia y le añadimos el chocolate derretido. Removemos bien.
Para montar la tarta:
Cubrimos el plato de presentación con papel de hornear o papel de aluminio, da igual, sólo es para proteger el plato de las manchas. El papel debe estar cortado en dos trozos, con la junta en el medio, para que cuando lo retiremos podamos sacar un trozo por un lado y el otro por el otro y sea más fácil y limpio. (A ver si puedo hacer un dibujo que lo explique mejor…)
Cortamos un círculo de papel de hornear del tamaño de la tarta y lo colocamos en el centro del plato que hemos protegido.
Sobre el círculo de papel ponemos la primera base de bizcocho y encima una capa de nata montada. Otra de bizcocho y otra de nata, y así hasta terminar con una de bizcocho.
Cubrimos toda la tarta con la cobertura.
Con cuidado metemos una espátula limpia entre el círculo de papel de debajo de la tarta y el papel de protección y retiramos con cuidado este último tirando suavemente por un lado y luego por el opuesto (el dibujo es necesario!!! voy con él!!).
Espero que con el dibujo se entienda mejor….
Pues ya está lista la tarta!
Queda con un intenso sabor a chocolate, esponjosa y húmeda. Una delicia!
Gracias por la receta Alba!
por dios!!! qué bueno Rosse. Voy a imprimir YA :)
ResponderEliminarBesos
Hola, hola, Rosella. Ayer vine, ví y salí corriendo para no "pecar"...¡Qué rica, por Dios!... De todas formas, la he guardado entre mis favoritos. Desde que me he enterado que pensar en que te estás comiendo un dulce riquísimo, lejos de entrarte más ganas, te relaja más que si evitas pensar en él para no caer en la tentación, ya he venido dos veces a ver tu tarta... Estupendamente explicada, como siempre, y por si fuera poco, con instrucciones y un gráfico para montarla. Chapeau!.
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