En primer lugar quiero pediros disculpas por la foto tan horrorosa de la tarta completa.
Hice la tarta por la mañana, con lo cual podría haber hecho la foto a mediodía, que es cuando la luz me viene mejor, pero.... se me olvidó y la hice por la noche.... Muy mala foto!
Resulta que ese día tenía que preparar cena para unos amigos que venían a casa, y entre unos preparativos y otros, se me fue el santo al cielo.
De todas formas, la tarta estaba tan rica que seguro que la vuelvo a hacer otro día y (si me acuerdo...) pondré una foto mejor.
Esta tarta se hace con dos masas, por eso luego queda con dos texturas, como con relleno. Está deliciosa y al ser de lima y limón, no es nada empalagosa. Os cuento...
Los ingredientes para la masa del bizcocho son:
100 gr de Harina de trigo
75 gr de Azúcar
2 cucharaditas de Levadura en polvo tipo Royal
1 pizca de Sal
100 gr de Mantequilla en pomada
2 Huevos
El zumo de 1 Limón
1/2 cucharadita de Vainilla
La ralladura de 2 Limones
Los ingredientes de la masa crema son:
250 gr de Queso Ricotta a temperatura ambiente
50 gr de Mantequilla en pomada
1 Huevo
La ralladura de 1 Lima y de 1/2 Limón
1/2 cucharadita de Vainilla
150 gr de Azúcar glas
Precalentamos el horno a 180ºC.
Engrasamos un molde desmoldable de 22 cm.
Empezaremos haciendo la masa crema del relleno:
En un bol batimos el queso con unas varillas hasta que esté suave y cremoso. Añadimos el huevo y batimos hasta que esté bien mezclado.
Añadimos el azúcar glas y volvemos a batir hasta que esté completamente integrado. Agregamos la mantequilla, la vainilla y las ralladuras de lima y limón y seguimos batiendo hasta que todo esté perfectamente mezclado.
Reservamos la mezcla.
Ahora hacemos la masa del bizcocho:
En un bol tamizamos la harina, el azúcar, la levadura y la sal. Añadimos la mantequilla, los huevos, el zumo de limón, la vainilla y la ralladura de limón, y removemos hasta que se mezcle todo, pero sin batir en exceso, sólo lo justo hasta que se mezcle todo.
En el molde que habíamos engrasado vertemos la mezcla del bizcocho.
Luego vertemos por encima la mezcla de la masa crema, pero con cuidado de hacerlo en el centro del molde. La masa se expandirá por sí sola y quedará a un centímetro más o menos del borde del molde, de forma que la masa del bizcocho se verá en todo el borde del molde.
Horneamos durante unos 35 o 40 minutos, hasta que la masa del bizcocho crezca y casi cubra la de crema, o hasta que al insertar un palillo en el borde de la tarta éste salga limpio.
Dejamos enfriar en el molde sobre una rejilla durante unos 10 minutos. Retiramos con cuidado el borde del molde y dejamos que la tarta termine de enfriar sobre la rejilla. durante una hora. Pasado este tiempo, la llevamos al frigorífico.
La servimos fría, con un poquito de azúcar glas.
Listo!
Espero que os guste.
Rossella
Suele pasar que en momentos de ajetreo se pase hacer la foto, aún así se aprecia qeu es una delicia!
ResponderEliminarbesos
si lleva limón ya me has conquistado, muy bueno!!!bsts
ResponderEliminarPues a mí también me has conquistado Rosella, como dice llimaverda, con el limón nos tienes en el bote :))
ResponderEliminarQuerida Rosella, lo que cuenta es la receta y ésta es fantástica, al igual que el aspecto de la tarta y el corte me parece estupendo. Tiene que estar muy bien ese contraste de sabores. Besitos.
ResponderEliminaruna tarta..........FANTASTICA
ResponderEliminarOye, de horrorosa nada, super apetitosa y riqusisima, y aunque la luz no fuera muy buena como tú dices me ha encantado. besos
ResponderEliminarYo le veo un aspecto delicioso y tiene que estarlo. Estas tartas son fantásticas para el verano. Un saludo.
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